Nocturno a la noche
José Revueltas (1937)
Es
preciso, es preciso, es preciso que se caigan los muros,
que
cesen los venablos de angustia que nos ha atravesado,
que
quede nada más un grito clamando, herido eternamente,
y
una sobrehumana colérica Es preciso, es preciso, es preciso que se caigan los
muros,
que
cesen los venablos de angustia que nos ha atravesado,
que
quede
nada más un grito clamando, herido eternamente,
y
una
sobrehumana colérica voluntad como ramas de un árbol furioso
para
golpear
hasta el polvo y el aniquilamiento.
Cuando
la
noche.
Cuando
la
angustia.
Cuando
las lágrimas. como ramas de un árbol furioso
para
golpear hasta el polvo y el aniquilamiento.
Cuando
la noche.
Cuando
la angustia.
Cuando
las lágrimas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario